jueves, 23 de octubre de 2008

Un lugar en el mundo


Y por fin, encontró su lugar en el mundo.



Y por fin, la inmensa ciudad le hizo un hueco entre la multitud para sentirse alguien.



Y por fin, respiró tranquilo al observar su alrededor y comprobar que no estaba solo.



Aunque pensaba que nunca lo conseguiría, miró al frente, recorrió con la mente las dimensiones que había adquirido su vida y se sintió grande.



Y por fin, supo que mientras fuera feliz, cualquiera podría ser su lugar en el mundo.

1 comentario:

Martuki dijo...

Pero qué maja eres.