miércoles, 1 de octubre de 2008

Mamá, quiero ser artista!


Cuando veo un musical (ya sea en el teatro o en el cine) me encuentro con sentimientos contradictorios: por una parte lo disfruto como una enana, cantando, bailando, se me pone la piel de gallina, vamos. Por otra parte siento envidia, pero envidia sana, admiro a esos actores que han sabido salir adelante y cumplir su sueño de bailar, cantar y disfrutar haciendo lo que les gusta.


No es que no me guste a lo que me dedico, me encanta traducir, pero siempre tendré esa espinita clavada. Me pregunto si, de haberlo intentado, habría podido llegar a algún sitio en el mundo del espectáculo, y la respuesta casi siempre es negativa. Creo que para ser artista hay que nacer artista, y yo, lamentablemente, nací "normal".


Y, ¿a qué viene todo esto? A que ayer vi el musical de Grease y una vez más, quedé fascinada con el arte de sus bailarines, cantantes y artistas.

1 comentario:

Martuki dijo...

Yo te animo a q te presentes al cásting d OT, eso si, diciéndote q no te van a coger. Tienes mal oído, maja, jajajaja, no sabes tararear!!! Pero te queremos!!! Menos mal q nos quedan los musicales para evadirnos y meternos en la piel d sus personajes...