jueves, 13 de abril de 2006

reflexiones perecederas


Vuelvo. Y me voy. Y todo sigue igual...
Te vas. Volverás. ¿Seguirá todo igual?
Y, ¿si no vuelves? Porque la vida va y viene, y nunca sabemos cuándo se detendrá.
¿Y si mañana me llega la hora? No me habrá dado tiempo a volver, y no sabré si todo iba a seguir igual.
No nos detenemos a pensar en los pequeños detalles que nos ofrece la vida hasta que ésta nos pone a prueba. Vivimos para labrar un futuro que ni siquiera sabemos que llegará. ¿Pesimismo? No, simplemente soy realista. Más que pesimista me definiría como una optimista realista. Porque sé lo que puede pasar y por eso aprovecho cada momento contigo, con vosotros, conmigo misma. Analizo cada detalle, observo cada movimiento, para no perder detalle, para luego en mis momentos de soledad y vacio recordar y sonreir al darme cuenta de que no estoy sola y de que cada momento vivido ha sido un tesoro...
Me he ido y no sé si volveré, no sé si tú volverás, pero puedo estar orgullosa de todo lo vivido.